UN PASEO POR EL HIERRO




Descubriendo la isla de El Hierro



  Siempre que volvemos de viaje, nos queda la sensación de que han sido pocos días los que hemos pasado en ese lugar, con la isla de El Hierro se intensifica esta sensación.
Nos han cautivado sus paisajes, sus pueblos, sus playas, la altura de sus carreteras y miradores, pero sobretodo sus gentes. Si el dicho dice "Donde fueres haz lo que vieres", y así ha sido, nuestra inmersión en la vida de la isla fue espectacular, y todo gracias a la amabilidad de los herreños.
Después de pasar unos día en Tenerife, ponemos rumbo a El Hierro, y aunque a uno de nosotros ya nos sorprendió hace algunos años, siempre quedó la promesa de que la que escribe la visitaría algún día, y así ha sido, por descontado que me ha sorprendido mucho, con planes de volver próximamente.

El Hierro o la isla del meridiano, era conocida como el último rincón del mundo. Dicen, que posee un magnetismo y una magia que seducen a todo aquel que llega. Paisajes volcánicos, sabinas retorcidas por el viento, verdes lugares o montañas escarpadas, que te llevan hasta playas tan bellas como el Verodal, o a divisar los roques que asoman en el mar, como el Roque de la Bonanza, montañas que detienen los vientos y crean diferentes microclimas en pocos kilómetros, y sus fondos marinos, tan apreciados por los submarinistas, cuya base principal la tienen en la Restinga. Con una población alrededor de los 11.000 habitantes, que apuestan por las energias limpias para autoabastecerse,  gentes sencillas y amables que te reciben como un amigo, con una gastronomía que quita el sentido, llena de pescados frescos, lapas y sus papas aderezadas con los mojos típicos de las Islas Canarias, todo esto es la descripción perfecta de la isla más diminuta del archipiélago canario, la increíble isla de El Hierro.





Día 1 - Llegamos a El Hierro
16 de julio 2017


Estamos en el aeropuerto de los Rodeos - Tenerife Norte, la compañía Binter es la encargada de llevarnos a El Hierro, unos aviones de hélices que hacen el servicio entre islas en un corto espacio de tiempo, otra opción es el ferry, pero tanto por tiempo y precio optamos por el avión.
Hay un aspecto a tener en cuenta si utilizas este medio, es habitual que pueda haber retrasos debido al mal tiempo, concretamente con las brumas que en la zona norte de Tenerife y en la isla de El Hierro son bastantes frecuentes.
La verdad, es que no tuvimos ningún inconveniente y salimos en hora. El tiempo de vuelo estimado 40 minutos y el precio para dos personas 152 euros, os recomiendo que siempre se controle el precio de los vuelos, pues un mes antes de comprarlos nos costaban el doble, nosotros hicimos la reserva a finales de Marzo, hice un seguimiento posterior de los precios y la verdad que en Mayo aún mantenían los mismos, pero no hay que fiarse .

Imprescindible alquilar un coche en la isla, hay servicio de guaguas, pero los horarios son siempre restringidos, así que o haces autostop o alquilas el vehículo si quieres aprovechar los días.
Nosotros en esta ocasión lo hicimos con Plus car, pero tienes otras compañías también en el hierro.
Alquilar con antelación unos meses antes es lo mejor, vas sobreseguro y el precio siempre es más ventajoso, no tuvimos problemas. Teníamos contratado un C3 o similar y nos dieron un Fiat Panda, pero aconsejo que si se puede se coja un coche algo superior, El Hierro tiene carreteras muy pronunciadas y el Panda va justito.


   El aeropuerto como os podéis imaginar es pequeño, situado entre Tamaduste y La Caleta, desde esta podéis ver como se aproximan los aviones para aterrizar, más adelante ya hablaremos de estos dos lugares, que nos han embaucado para que volvamos de nuevo.
 La oficina de información turística, nos proporcionó mapas y sugerencias de rutas guiadas muy interesantes, lugares de mayor interés de la isla, como son La playa del Verodal, el Sabinal, las Puntas, el Charco Azul, Tamaduste, La Caleta ,el Mirador de la Peña, el Árbol Garoé .... etc.,tantos lugares que cinco días no fueron suficientes, se nos hizo corto y se quedaron cosas en el tintero.



Listos!!!  Gps instalado, coche cargado y nos vamos dirección La Frontera, allí nos espera un apartamento en Finca Wapa, son apartamentos independientes dentro de una finca rural, como casitas, al nuestro se accedía desde la misma calle sin pasar por el interior de la finca, con un pequeño patio particular para tomar el fresco o comer fuera, decorado con un estilo rustico, muy limpio, perfecto en relación calidad - precio.



  Son más de las tres y el hambre apremia, no nos podíamos imaginar lo que en breves minutos viviríamos y lo importante que es para los habitantes de El Hierro.


Continuará .......

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